Los hipercoches con motor de combustión interna todavía están vivos, y parece que la próxima gran novedad no vendrá de Bugatti, Pagani o Koenigsegg, sino… de Grecia.
No, sus ojos no lo están engañando. El país mejor conocido por “Olivares y Filósofos” está fabricando el próximo hipercoche. La empresa en cuestión es Spyros Panopoulos Automotive (SP Automotive) y se fundó en 2019 con el objetivo de fabricar algunos de los automóviles más rápidos e innovadores del mundo. De hecho, una declaración audaz, que está respaldada por algunas cifras interesantes y un nombre intimidante para su creación.
Grecia estaba a punto de convertirse en un nuevo país productor de ultradeportivos, y esto ya estaba ocurriendo tras la presentación del nuevo SPA Chaos, una creación del empresario Spyros Panopoulos, fuertemente ligado al mundo del automóvil a través del desarrollo de tecnología.
Y Chaos no es un coche cualquiera, pues la marca lo define como el primer «ultradeportivo» del mundo, y no es una denominación exagerada teniendo en cuenta que puede ofrecer hasta 3.064 caballos, y decimos «hasta» porque la «entrada» La versión tiene 2.049 CV.
En comparación con la competencia, el Bugatti Chiron Super Sport 300 Plus tiene 1.600 hp, el Koenigsegg Gemera elevó la vara a 1.700 hp y el Rimac Nevera los superó a todos con 1.888 hp.
SPA Chaos: características
El primer ultradeportivo de la industria griega se ofrecerá en dos versiones: Earth y Zero Gravity. Ambos están propulsados por un motor de gasolina biturbo 90° V10 de 4.000 cc, que puede superar las 11.000 rpm en la versión base y las 12.200 rpm en la gama alta gracias a la asistencia eléctrica. El primero producirá 2.049 caballos de fuerza y 1.025 lb-pié de torque, el segundo sube a 3.064 Hp y 1.463 lb-pié, números verdaderamente estratosféricos.
Motor y desempeño
Ambos motores estarán controlados por una transmisión automática de doble embrague y ocho velocidades, y la tracción integral será estándar.
Vayamos a los beneficios anunciados. La versión Earth ofrecerá el 0-100 km/h en 1,9 segundos, el 0-200 en 2,7 segundos y el 0-400 km/h en 8,1.
Qué hay del Zero Gravity?, llegará a 100 en 1,55 segundos, a 200 en 1,7 segundos y a los 400 km/h en menos de 7,5 segundos. En ambos, la velocidad máxima anunciada está por encima de los 500 km/h.
Y para detenerlo, grandes discos ventilados de carbono de 428 milímetros delante y 416 milímetros detrás, ambos ocultos por unas preciosas llantas de 22 pulgadas.
Dimensiones
El Chaos mide 5053 mm de largo, 2068 mm de ancho, 1121 mm de alto y tiene una distancia entre ejes de 2854 mm. Las diferencias entre las versiones están en el peso, con 1.388 kilos para el Chaos Earth (relación 1,47 CV/kilo), mientras que el Zero Gravity desciende hasta los 1.272 kilos (relación 2,40 CV/kilo).
El Chaos está hecho completamente con una impresora 3D, incluidas las ruedas hechas de una aleación de titanio y magnesio. El chasis monocasco está fabricado en Zylon, que según la marca es “la fibra sintética más resistente del mundo. También es la primera fibra orgánica cuya resistencia transversal supera la del acero y la fibra de carbono”. Otras partes están hechas de fibra de carbono y Kevlar.
Aerodinámica
La marca indica que el trabajo aerodinámico en su estructura es tan avanzado que el coche es capaz de generar la misma carga aerodinámica que se ve en los actuales coches de Fórmula 1.
Interior
En cuanto al interior, se trata de un biplaza con una posición de conducción muy avanzado, y la marca indica que todo el sistema funciona con realidad aumentada. Entre las tecnologías está la conexión 5G a la web, además de la comunicación coche a coche.
Precio
SPA anunció una producción inicial de 20 unidades al año, pero tiene capacidad para llegar a las 100 unidades y pretende venderlo en los cinco continentes. ¿precios? Chaos Zero Gravity costará 12,4 millones de euros, una brutalidad que pocos pueden permitirse.
Si no tiene tanto dinero en efectivo, puede pagar «solo» € 5,5 millones para Chaos Earth Edition y sus «moderados» 2,000 caballos de fuerza.
El ultradeportivo Chaos Zero Gravity alcanza los 500 km/h
El ultradeportivo Chaos Zero Gravity es el superlativo de todos los coches. ¿y porque? Porque si la palabra superdeportivo apareció con el Porsche 959 en 1986 es porque fue uno de los primeros deportivos capaces de superar los 300 km/h gracias a sus innovadoras tecnologías como la tracción a las cuatro ruedas, su alerón integrado y sobre todo su Motor biturbo 450. CV
Luego, a mediados de la década de 2010, llegó el hipercoche, que comúnmente se define como uno con una relación potencia-peso de 1 o más. Y como todos los coches superan los 1.000 kg, esto significa que sus motores deben desarrollar más de 1.000 CV, como el Bugatti Bolide (1.850 CV) considerado el mejor motor del mundo con el menor peso posible, el Aston Martin Valkyrie (1.160 CV) o el Mercedes One (1.230 CV). Y ahora el griego Spyros Panopoulos, fundador de la marca SP Automotive, reclama el título de «ultracar» de su nuevo automóvil: el Chaos Zero Gravity.
El Chaos Zero Gravity ignora la tendencia eléctrica y funciona con un motor tradicional
A diferencia del Rimac Nevera 100% eléctrico o el Hispano-Suiza Carmen Boulogne, el SP Automotive Chaos funciona con gasolina, a la antigua. El motor es un 4.0L V10 biturbo que declara 3.000 hp a 12.000 rpm gracias a su bloque de aluminio y sus bielas moldeadas por una impresora 3D.
Nota: la versión Zero Gravity que aquí nos interesa es diferente a la versión «normal» llamada Earth Version, que ofrece «solo» 2050 CV. Este coche definitivamente será el auto deportivo número uno más rápido del mundo.
Por lo tanto, el Chaos Zero Gravity tiene una fenomenal relación potencia-peso de 3, gracias al bajo peso de su chasis de carbono Kevlar, una característica que permite que este automóvil sea conducido por un equipo de conductores. Esta es una característica que permite a este coche cohete acelerar de 0 a 100 km/h en solo 1,55 seg. de 0 a 300 km/h en solo 7,5 seg. Eso es puro rendimiento mejor que un coche de Fórmula 1 y superando al SSC Tuatara, que fue el auto más rápido del planeta. Y si el Zero Gravity sigue por su camino actual, debería ser capaz de superar los 500 km/h (en pista, claro) y romper así el récord de velocidad de 490 km/h (no reconocido oficialmente), del Bugatti Chiron sport 300+ conducido por Andy Wallace en agosto de 2019. Por supuesto, con su rendimiento extraordinario y su producción de 15-20 autos al año, se espera que SP Automotive Chaos Zero Gravity cueste más de 12 millones de euros.
Nuevas aleaciones para piezas de motor construidas con impresoras 3D
El automóvil tendrá ruedas impresas en 3D de 22 pulgadas y la potencia de frenado provendrá de los enormes frenos, que tienen discos de 428 mm en la parte delantera y 416 mm en la parte trasera.
Todo esto sonaría como un delirio absurdo, hasta que descubras que el ingeniero de Atenas detrás del proyecto, dirige una exitosa empresa de alta tecnología que fabrica componentes especiales para McLaren, Lamborghini y otros superdeportivos. Además, también desarrolla tecnología para lanchas rápidas y aplicaciones militares. Esto debería ser prueba suficiente de que se está realizando una ingeniería seria detrás del desarrollo de Chaos para que alcance los números mencionados anteriormente.
El ultradeportivo incorporará algunos de los materiales más exóticos utilizados en la aviación, como las fibras de p-fenileno-2,6-benzobisoxazol (un polímero especial ligero y fuerte), kevlar, fibra de carbono y titanio.
El escape estará hecho de Inconel impreso en 3D. Además, Spyros Panopoulos ha presentado más de 30 nuevas patentes para soluciones innovadoras, incluidas aleaciones de berilio para turbocompresores, nuevas aleaciones de aluminio para bloques de motor entre otras.
Según el ingeniero y fundador, crear su propio coche era el paso lógico. “Dado que de todos modos fabricamos piezas para superdeportivos, en un momento tuvimos la idea de crear nuestro propio automóvil para poner todas estas piezas”, dijo Panopoulos.
Spyros también dijo que está financiando el proyecto con sus propios recursos, pero que está en conversaciones con inversionistas más grandes. El ingeniero también tiene el incómodo pero noble objetivo de mantener el proyecto por su cuenta, mientras atrae a muchos de los jóvenes talentosos de Grecia que han estudiado diseño e ingeniería automotriz y normalmente se van al extranjero en busca de mejores oportunidades.
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